He aprendido varias cosas interesantes con este artículo excelente y eso me alegra mucho.
Por un lado, jamás pensé que con el Maracuyá se podría hacer dulces. Es que me parece una fruta tan delicada, que nunca se me hubiera ocurrido tan utilización.
Por otro, no conocía de este otro nombre: Parchita. ¡Qué curioso nombre ese!
¡Por cierto, se percibe deliciosa tu receta!
¡Buen provecho!