Hace casi 2 días que estoy sin teléfono y no sé cuánto tiempo más podré seguir así. Es como si mi mundo entero se hubiera paralizado sin tener un teléfono móvil conmigo, estoy desconectado del mundo y de todo lo que me importa.
¿Cómo conseguiría dinero en este momento para comprar otro teléfono? Esta es una pregunta que me mantuvo despierto toda la noche. Puedo escribir esta publicación desde una vieja computadora portátil que tengo en casa, y eso es porque la electricidad acaba de llegar. Pero eso es lo único que puedo hacer, todas las demás cosas que hago en línea ahora están suspendidas. No puedo acceder a mis billeteras de criptomonedas ni verificar otras cosas relacionadas con las finanzas. Mi mundo está destrozado en este momento.
Primero que nada, déjame contarte cómo comenzó toda esta pesadilla. Algo inimaginable sucedió hace 2 noches alrededor de las 11:55 p. m. Estaba trabajando en una publicación de blog muy importante para la comunidad Be-entrepreneur y de repente recordé una tarea urgente que esperaba en Telegram. EspañolComo faltaban solo cinco minutos para la medianoche, me apresuré a completarlo para no perder mi recompensa.
Fue entonces cuando las cosas se pusieron mal. Mi batería estaba en un cómodo 56 por ciento cuando abrí Telegram. Y luego, bueno, lo que sucedió después fue como ver una película de terror en cámara lenta. Primero, comenzó a caer muy rápido: del 56 por ciento al 42 por ciento y luego cayó aún más al 22 por ciento en cuestión de segundos. La pantalla se puso negra antes de que pudiera alcanzar mi cargador.
Con los desesperados intentos de reactivación durante dos horas, no hubo absolutamente ningún resultado. No se cargaba, no se iluminaba la pantalla; no había sucedido nada. Fue entonces cuando desperté a mi hijo, nuestro ingeniero de teléfonos no oficial en la familia. Con su destornillador en medio de la noche, abrió el teléfono, y la noticia que salió de la boca de este inocente tipo fue devastadora: "La batería está muerta y ya no tiene vida".
Pero espera, se pone peor. "El panel tampoco es muy bueno, papá. Necesitas otro teléfono", dijo. No podía creer lo que escuchaba. Este teléfono era mi todo: mi oficina, mi administrador de negocios, mi conexión con el mundo. Y ahora, en esta difícil economía, ni siquiera tengo una cuarta parte de lo que cuesta un teléfono Android básico.
Mientras escribo esto, lo hago desde una vieja computadora portátil que, afortunadamente, todavía funciona cuando hay electricidad. Pude reescribir y publicar mi publicación original del blog, pero todo lo demás, incluidas las billeteras de criptomonedas, las actividades financieras y las comunicaciones, quedó en suspenso. Podría sentirme como un náufrago en una isla desierta digital.
La peor parte es que acabo de invertir en un proyecto de criptomonedas DeFi que tengo que monitorear las 24 horas del día, los 7 días de la semana si quiero maximizar el retorno de la inversión. No controlar el proyecto todos los días es lo mismo que perder $4 todos los días, lo que solo puedo hacer desde mi teléfono móvil. Cada momento sin acceso a mi teléfono no solo es debilitante; cuesta dinero.
¿Y sabes qué hace que esta situación sea aún más frustrante? Ni siquiera puedo cambiar las pequeñas recompensas de HBD que tengo en Hive por mi moneda local, a menos que necesite la ayuda de un amigo que pueda hacerlo por mí. Todo está bloqueado porque necesito aplicaciones móviles para acceder a mis intercambios de criptomonedas como Binance y otros. Es como alguien que tiene dinero en el bolsillo, pero no puede gastarlo.
La realidad se está imponiendo con bastante dureza. Me siento aislado de todo lo que importa sin mi teléfono. Por supuesto, esta computadora portátil es mi salvavidas temporal solo para escribir, pero no es lo mismo. No puede reemplazar a un teléfono móvil en el mundo actual por conveniencia y necesidad, particularmente para inversiones sensibles al tiempo.
Por eso es aún más irónico compartir mi historia mientras trato de encontrar una manera de comprar un teléfono nuevo en un país donde las dificultades económicas ya están llevando a todos al límite. Cada día sin un teléfono no es solo una barrera de comunicación; se está convirtiendo en un revés costoso para mis objetivos financieros.
¿Alguna vez has estado en una situación así? ¿Cómo afrontaste, de repente, la pérdida de tu mundo digital? Necesito un consejo y ayuda ahora mismo sobre cómo manejar esta situación.
El mundo sigue girando, pero el mío parece detenerse con mi teléfono.
English Version
It's been almost 2 days now that I have been without a phone, and I don't know how long I can keep going this way. It as if my whole world has come to a standstill without having a mobile phone with me, I am being cut off from the world and all that matters to me.
How would I get money at this point to buy another phone? This is a question that kept me awake all night. I can write this post from an old laptop I have at home, and that's because the electricity just came on. But, that is the only thing I can do, all other things I do online are now in suspension. I can't access my crypto wallets or check on other finance-related things. My world is shattered right now.
First of all, let me tell you how all this nightmare started. Something unimaginable happened 2 nights ago at around 11:55 PM. I was working on a very important blog post for the Be-entrepreneur community and suddenly remembered an urgent task waiting on Telegram. Having only five minutes left before midnight, I quickly switched to complete it so I wouldn't lose my reward.
That's when things went south. My battery was at a comfortable 56 percent when I opened Telegram. And then, well, what happened next felt like watching a horror movie in slow motion. First, it started falling down really fast: 56 percent to 42 percent and then fell further to 22 percent in a matter of seconds. The screen went black before I could reach for my charger.
With the desperate attempts of revival for two hours, there were absolutely no results. No charging, no screen light; nothing had happened. That's when I woke up my son, our unofficial phone engineer in the family. With his screwdriver in the middle of the night, he opened up the phone, and the news coming out of this innocent chap's mouth was devastating: "The battery is dead, and there's no life in it anymore."
But wait, it gets worse. "The panel isn't too good either, Dad. You need another phone," he said. I couldn't believe my ears. This phone was my everything - my office, my business manager, my connection to the world. And now, in this tough economy, I don't even have a quarter of what a basic Android phone costs.
As I type this in, it is from an old laptop that luckily still works when there is electricity. I was able to rewrite and publish my original blog post, but everything else, including crypto wallets, financial activities, and communications all on hold. I could feel like a castaway on a digital desert island.
The worst part is that I just invested in a DeFi crypto project that I have to monitor 24/7 if I want to maximize ROI. Not checking up on the project every day is the same as losing $4 every day, which I can do only from my mobile phone. Every moment without access to my phone isn't just debilitating; it costs money.
And you know what makes this situation even more frustrating? I can't even exchange the little HBD rewards I have on Hive for my local currency except I have to need the help of a friend who could do that for me. Everything's locked away because I need mobile apps to access my crypto exchanges like Binance and others. It's like someone who has money in his pocket, but cannot spent it.
Reality is setting in rather harshly. I feel cut off from everything that matters without my phone. Of course, this laptop is my temporary lifeline only for writing, but it is not the same thing. It can't take the place of a mobile phone in today's world for convenience and necessity, particularly for time-sensitive investments.
This is why it is extra ironic to be sharing my story while trying to find a way to afford a new phone in a country where economic hardship is already pushing everyone to their limits. Every day without a phone isn't just a communication barrier; it's turning into an expensive setback with my financial goals.
Have you ever been in such a situation? How did you cope, all of a sudden, with the loss of your digital world? Man, I need some advice and some help right now on how to maneuver this situation.
The world keeps on spinning, but mine seems to stop with my phone.
Posted Using InLeo Alpha