Existen gatillos que resultan detonantes para reacciones como las de tu hermana, quien por suerte fue atendida para dar con la causa de sus convulsiones, pero no siempre pasa o es atendida por los cuidadores.
Considero que este tema es algo para hablar con nuestros hijos, demostrarles que pueden hablar sobre aquello que les incomoda y no sentirse diferentes o raros, ni mucho menos hacer burlas sobre lo que nos dicen, pues aunque parezca que es algo que solo afecta a los adultos, el stress también lo sufren los niños.