Finally, the waiter brought the grill platter and the plate of marbled beef. One thing I didn’t like was that the marbled beef plate had some smudges on the rim. I had to clean the edges with a napkin myself.

As for the grill platter, everything looked perfect. My brother was the first to comment that it was way too much food for just the two of us. I agreed with him—it really was a lot—but we decided to relax and enjoy it at our own pace.

I must say, the flavor of the marbled grilled beef was amazing. The meat was tender and cooked medium. I loved the taste, and my brother agreed—it was definitely the highlight. As I said before, grilled beef is a man’s weakness.

On the other hand, the meat from the grill platter was a bit tough. It tasted good, but it didn’t seem very fresh. In the end, the 400 grams of marbled beef clearly stood out as the best.

I found it odd that there was no chicken or pork on the grill platter. I’ve had Migo’s platters before, and they usually include those meats. I didn’t ask the waiter why—honestly, I wasn’t that interested. My peace of mind matters more.

The Venezuelan cachapa included in the platter was delicious, as were the fried yuca pieces. The grill platter looked very appetizing as well. One issue we had was when asking for the check—the waiter disappeared. We asked another server to bring it and to pack the leftovers, but he ignored us.

We waited about 15 minutes until we told a different waiter, who was much more polite and attentive. Just as I was about to pay, the original waiter returned to hand me the bill—I noticed he had been taking a break. I didn’t think it was right for another server to pull him away from his break just to handle the bill and packaging. Thankfully, the other employee took care of everything politely.

The bill came to $16 (or HBD), which wasn’t expensive considering the amount of food we enjoyed. I ordered an extra cachapa to go, which brought the total to $19. It was a pleasant meal—affordable, with a few notable details. Migo remains one of the best dining options in the state of Lara.

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Sabor a Brasa: Carne Entreverada en Migo

El fin de semana pasado tuve la oportunidad de comer parrilla en la Migo. Migo es uno de los restaurantes campestres más relevantes del estado Lara; comí en la sucursal que se encuentra en la Troncal 7, al final de la avenida Florencio Jiménez. Específicamente, vía a Quíbor. Los hombres tenemos una debilidad con la parrilla, sobre todo por los cortes de carne. Es lo que más llena y es más delicioso.

Me encontraba acompañado de mi hermano. Apostamos, por ordenar, una parrilla pequeña para dos personas y 400 gramos de carne asada entreverada. El mesero fue muy amable, decidimos comer aquí porque es muy económico y la comida es de alta calidad. Además, teníamos mucha hambre; duramos todo el día manejando la motocicleta.

Noté que en el restaurante había muchas personas; quizás era porque era fin de semana. Mi hermano y yo teníamos dudas de qué plato escoger del menú al principio, pero pedimos la recomendación al mesero debido a que queríamos comer bastante carne.

Ya he comido en este restaurante con anterioridad; así que tengo experiencia sobre qué comida escoger. En el caso de la parrilla, hay que pedir carne adicional obligatoriamente debido a la alta cantidad de contornos que le colocan en ella.

Esperamos, aproximadamente, 15 minutos por nuestra orden. Fue mucho tiempo de espera, debido a que llegamos y el mesero tomó de inmediato la orden. Tuve que preguntarle al mesero por qué la comida demoraba tanto, pero me indicó que estaba por traerla.

El mesero, lo primero que colocó en la mesa fueron las salsas para untar la carne y la parrilla, junto a los utensilios, los platos y el juego de panela (la panela es un jugo hecho a base de una panela de caña de azúcar tostada). Me gustó la presentación de las salsas para untar.

Posteriormente, el mesero, por fin trajo la parrilla y el plato de carne asada entreverada. Algo que no me gustó fue que el plato de la carne asada entreverada estaba chispeado; tuve que tomar una servilleta y limpiar los bordes del plato.

En el caso de la parrilla, todo era perfecto. Mi hermano, lo primero que me dijo es que era demasiada comida para nosotros dos. Concordé con él en ese aspecto, era mucha comida, pero decidimos disfrutar y probarla con tranquilidad.

Debo destacar que el sabor de la carne asada entreverada era impresionante; la carne era suave y estaba asada a término medio. Me gustó el sabor; en ese aspecto concordamos mi hermano y yo. Lo he resaltado: la debilidad de todo hombre es un asado de carne.

Por el contrario, la carne de la parrilla estaba un poco dura; el sabor era bueno, pero se notaba la poca frescura. La evaluación fue inminente; la mejor carne asada era la de los 400 gramos de carne asada entreverada.

Me pareció extraño que en la parrilla no hubiera trozos de pollo, ni de carne de cerdo. He comido con anterioridad parrillas de Migo y tienen esos dos tipos de carnes. No sé qué pasó, no le pregunté al mesero; la razón es que no tenía interés. Mi paz es lo más importante.

La cachapa venezolana de la parrilla estaba deliciosa, así como también los trozos de yuca frita. Además de que la parrilla se veía muy apetitosa visualmente. Un inconveniente que se presentó fue al momento de pedir la cuenta: el mesero desapareció y le dijimos a otro que la trajera y colocara lo que no pudimos terminar de comer para llevar, pero ese mesero no prestó atención.

Duramos 15 minutos esperando; tuve que decirle a otro que fue más amable. Cuando iba a pagar, el mesero que nos atendió al inicio se acercó a darme la factura; vi que estaba merendado (era su espacio de descanso). Me pareció muy mal que lo llamara el otro mesero únicamente para darme la factura y colocar la comida para llevar; afortunadamente, todo eso lo hizo otro trabajador más amable.

La cuenta fue de 16 USD (o HBD); no fue muy alta para la cantidad de comida que disfrutamos. Pedí al final una cachapa adicional para llevar y esto llevó la cuenta a 19 USD (o HBD). Fue una comida agradable, con detalles notables, pero económica. Migo es una de las mejores opciones para comer en el estado Lara.

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